Aspiración de polvo y virutas

El polvo de ciertos materiales como, pinturas que contengan plomo, ciertos tipos de madera y algunos minerales y metales, puede ser nocivo para la salud. El contacto y la inspiración de estos polvos pueden provocar en el usuario o en las personas circundantes reacciones alérgicas y/o enfermedades respiratorias.
Ciertos polvos como los de roble, encina y haya son considerados como cancerígenos, especialmente en combinación con los aditivos para el tratamiento de la madera (cromatos, conservantes de la madera). Los materiales que contengan amianto solamente deberán ser procesados por especialistas.

Observe las prescripciones vigentes en su país sobre los materiales a trabajar.

Autoaspiración con caja colectora de polvo (ver figuras E1E4)

Coloque la caja colectora de polvo (1) sobre la boquilla de expulsión (15), hasta que encastre.

Para vaciar la caja colectora de polvo (1), retire la caja colectora de polvo hacia abajo.

Antes de abrir la caja colectora de polvo (1), debe golpear la caja colectora de polvo sobre una base firme como se muestra en la figura, para soltar el polvo del elemento filtrante.

Tome la caja colectora de polvo (1) por las concavidades de asidero, doble el elemento filtrante (16) hacia arriba y vacíe la caja colectora de polvo. Limpie las aletas del elemento filtrante (16) con un cepillo blando.

Aspiración externa

El aspirador debe ser adecuado para el material a trabajar.

Para aspirar polvo especialmente nocivo para la salud, cancerígeno, o polvo seco utilice un aspirador especial.