Hacen tu trabajo más eficiente y ofrecen numerosas posibilidades de aplicación en el control, mantenimiento y reparación, ya sea al comprobar calefacciones y sistemas de aire acondicionado o al detectar fugas en las tuberías de agua en el área de saneamiento.
En todas estas tareas, la principal preocupación son siempre las temperaturas y es precisamente aquí donde las cámaras térmicas de Bosch pueden ayudarte: puedes utilizarlas para determinar rápidamente si, por ejemplo, una calefacción distribuye el calor de manera uniforme y, posteriormente, mostrar los resultados al cliente con la imagen térmica. Gracias a esta visualización inmediata de las temperaturas, podrás ver directamente si todo funciona correctamente o si existe algún problema. Esto te supone un ahorro de tiempo y, gracias a la documentación profesional, te permite ofrecer al cliente transparencia, una de las bases más importantes para la confianza.